miércoles, 18 de diciembre de 2019


Nochebuena y Navidad




Se acerca la Nochebuena, la mejor de cuantas noches han sido, y  la Navidad. Mientras las agujas caminan hacia la medianoche procuramos sentirnos mejores peinando nuevos sueños con renovadas esperanzas.
Desde lejos, desde siempre, se acercan las voces de los villancicos, repletos de emociones diciendo: "En el portal de Belén hacen lumbre los pastores/ para calentar al Niño que ha nacido entre las flores...".  Y también:  La Virgen está lavando y tendiendo en el romero/ los angelitos cantando y el romero floreciendo./La Virgen está lavando con un poquito jabón/ se le picaron las manos, manos de mi corazón..."
Anuncian al niño nacerá en Belén, infinito y para ser compartido por todos. He ahí su simbolismo. Todo nacimiento es motivo de alegría porque da cabida a la vida y la esperanza.
Dejemos que el alma suba hasta la superficie para que podamos sentirnos fraternos junto al arbolito navideño o al pesebre tan pobre como aquél, y demos gracias con ilusiones renovadas. Y cuando escuchemos al ruiseñor anunciando el nacimiento, levantemos una copa brindando como, en la primera Nochebuena, por todos los hombres de buena voluntad, con una mochila abierta por corazón.
Y así, junto al arbolito y dando gracias con renovadas ilusiones, sentiremos todos que el alma se alza alta, muy alta, besando las mejillas queridas.
¡Feliz Navidad!