domingo, 12 de febrero de 2017

Tres preguntas a Antonio Skármeta



            Antonio Skármeta, dueño de una vasta y notable obra literaria, ha sido galardonado con el Premio Nacional de Literatura de Chile y, entre otros, ha recibido premios de UNESCO, el Medici y el Planeta.
        Su famosa novela “El cartero de Neruda”, traducida a los más diversos idiomas, dio lugar a la laureada película italiana “Il postino”. Asimismo, tiene esta obra versión teatral. Tuve el placer de ver una de ellas en Nueva York. Para señalar apenas otros dos libros suyos, sobresalientes por cierto, basta con citar la novela “Un padre de película” y su muy reciente colección de relatos “Libertad de movimiento”.
          Nacido en Antofagasta, en 1940, egresado del Instituto Nacional, Antonio Skármeta fue profesor en Europa y Estados Unidos.
 Cordial y sumamente generoso, he tenido el placer de dialogar varias veces con mi admirado escritor amigo. Siguen dos preguntas.

       --¿Cómo nace, crece y germina una obra en tu imaginación? ¿Puedes contarnos algo de tu método de trabajo?
       --Cuando escribo sigo más o menos el mismo procedimiento. Cuando era joven tenía otro tipo de trabajo. Ahora, normalmente, cuando escribo, hago una primera versión a la que llamo "magma". Ella es una escritura informe, emocional, llena de imágenes, donde voy buscando lo que quiero escribir. Tengo ciertas emociones, ciertos recuerdos, ciertos anhelos sobre los que discurro pero sin afinarlos, porque no quiero que nada intelectual intervenga en la primera etapa. Es una etapa de expresión emocional muy libre. Y allí, en ese magma, en esa materia, van surgiendo luego los núcleos de interés: una situación, un diálogo, un personaje, una frase. Y de pronto, cuando termino de escribirlo, entre esas muchísimas páginas, sé que tengo una novela. Y luego comienzo una escritura literaria, tratando de que todo aquello que fue confusión y búsqueda, tenga tersura y llegue al lector de una manera transparente; y procuro que tenga ritmo, que tenga gracia, y que emocione y entretenga. Ese es mi método.
           
          --¿Escribes a mano, a máquina o directamente en la computadora?
          --Escribo todo en la computadora. Muchos recomiendan que hay que tener una versión a mano, para después vendérsela a una biblioteca en Estados Unidos. (Sonríe) Donoso hacía eso...
           
         --¿La literatura nos ayuda a vivir mejor?
         --Muchísimo. Porque los lectores son siempre personas más sensibles, más amplias de criterio, más democráticas en su relación con los otros; y son más inspirados, tienen un verbo más cautivador y difícilmente aceptan la rutina de la vida. Por ello, están buscando aventuras de tipo espiritual o aventuras terrenas, y la literatura es tanto un modo de conocimiento de la realidad como una manera de crearse una vida. No aceptar la vida, sino inventársela.