sábado, 22 de diciembre de 2018

Nochebuena y Navidad


Tras la Nochebuena, la mejor de cuantas noches han sido, llega la Navidad.
Mientras las agujas caminan hacia la medianoche, procuramos sentirnos mejores y nos atrevemos a peinar nuevos sueños con renovadas esperanzas.
Con una mochila abierta por corazón, a la medianoche dejamos un beso en las mejillas queridas, esperando idéntica ofrenda.
Desde lejos, desde siempre, escuchamos las voces de los villancicos, y nos emocionamos: "En el portal de Belén hacen lumbre los pastores/ para calentar al Niño que ha nacido entre las flores...".
Y también: “La Virgen está lavando y tendiendo en el romero/ los angelitos cantando y el romero floreciendo./ La Virgen está lavando con un poquito jabón/ se le picaron las manos, manos de mi corazón...".
 Y cuando oímos al ruiseñor anunciando el nacimiento del niño en Belén, levantamos nuestras copas y brindamos, como en la primera Nochebuena, por todos los hombres de buena voluntad.
Y damos gracias con ilusiones renovadas porque toda Navidad es nacimiento y todo nacimiento motivo de alegría, dando cabida a la vida y la esperanza.
           ¡Feliz Navidad!

jueves, 13 de diciembre de 2018


Escribiendo una novela
  
Las ediciones uruguaya y española


       Decía Elizabeth Bowen que un escritor es un “alumno desatento en el aula de la vida”. E insistía en que, al revés que el hombre  que no tiene inclinaciones literarias, carece de perspectivas fijadas de antemano y, rara vez, observa algo deliberadamente. Lo que hace es ver lo que no se propuso ver, y recordar cosas que no parecen posibles.
            Yo sé (con tantas novelas escritas) que cuando uno comienza a escribir una novela, inesperadamente se dan la mano incontables momentos de nuestra propia vida en esa historia imaginaria que vamos desarrollando. Por ejemplo, una tarde en un parque hace muchos años y que no habíamos recordado hasta ese instante; una canción que escuchamos de niño; las palabras que hace cinco días nos dijo un amigo, tomando un café. Qué sé yo. Todo ello coincide con lo que estamos escribiendo y llega en el momento adecuado. Así, de esta manera, crece una obra literaria.

miércoles, 5 de diciembre de 2018


Amar para escribir


Franz Kafka

    Franz Kafka buscó y amó a una sola mujer en las sucesivas mujeres que conoció. El novelista español Luis Goytisolo dijo cierta vez que los períodos más creativos de Kafka coincidieron con sus intensas relaciones amorosas: “Kafka necesitaba amar. La correspondencia o la falta de correspondencia de ese sentimiento parecen secundarias, pero lo importante es que el amor estimulaba su capacidad creadora, y no como fuente de inspiración, sino pura y simplemente como fuente de energía”.
Es decir, amar para poder escribir, que no sé si es amar. Y escribir para poder vivir. Todo lo relativo al señor Kafka, como señaló acertadamente Borges, será olvidado, salvo sus cuentos, que seguirán contándose.